La Práctica Constante del Crecimiento Espiritual: Auto-Disciplina
Sucede que en nuestro camino espiritual, a veces aparecen los monstruos, pero no nos damos cuenta que esos monstruos vienen de nosotros mismos: de nuestro pasado. Es nuestra creación y de nadie más. Es nuestra responsabilidad, así como también es nuestra la responsabilidad de sanar. Si vivimos anclados en el pasado, nuestro progreso espiritual y material, se verá truncado. ¿Quién ante un recuerdo de algo sucedido en nuestro pasado, dice que se le echó a perder el día? o simplemente deja que la nostalgia le invada y se queda allí. Pues anclados en el pasado no podremos nunca avanzar y si queremos auto-sabotear nuestro crecimiento, pues aparecerán estos monstruos que nos harán literalmente temblar de pavor. Nuestro subconsciente va almacenando estas memorias, a veces es experto en almacenar memorias dolorosas, porque muchas veces no recordamos los momentos felices, sino aquellos que involucran sufrimiento, rabia o dolor. ¿Cómo lidiar con estas memorias dolorosas?: una maner